AUSENCIAS
Tu piel lo extraña, tu rabia,
esa profunda rabia del despojo,
flota oculta en la ternura
del recuerdo.
Su cara, sus manos cálidas
que una vez más te abrazan,
se alejan en la nostalgia,
vagabundean en la angustia,
despiertan con la lucha
y con los sueños.
Los Pañuelos Blancos de la Plaza
hoy como siempre
pedirán justicia, en su nombre,
en el tuyo, en el mío, en el de todos.