LAS CARACOLAS
A los setenta años mi padre (jubilado ferroviario y comerciante) decidió comenzar lo que sería su último proyecto: recubrir enteramente con caracoles su casita en Mar del Sur. Así todas las mañanas, de noviembre a marzo, recorría las infinitas playas recolectando caracoles de distintas formas y colores. Al llegar a su casa los seleccionaba y los guardaba en antiguos tarros de galletitas .Los pegaba durante la tarde, combinándolos con piedras de colores, siguiendo una planificación... Continuar leyendo