Con las luces encendidas,
por algunos instantes
estuvimos juntos.
Las siluetas de los rostros,
el contorno de los cuerpos,
casi nos eran familiares.
Podíamos apenas adivinar
los deseos, los ocultos pensamientos.
Por un momento, sus sentimientos
fueron los propios,
y de a poco, casi
sin darnos cuenta,
nos desgarró la distancia,
se rompieron en la espuma
las palabras,
y un grito de adiós
nos cobijó en el recuerdo.
Como barcos en la noche,
Por algunos instantes
estuvimos juntos
en un zigzag del tiempo.
Las imágenes hoy son borrosas,
apenas un hilván delgado
que recorre mi nostalgia,